Tips para hacer una correcta sublimación

La sublimación se ha convertido en una de las técnicas de impresión más populares y versátiles, especialmente en el mundo de la personalización de productos. Con la capacidad de transferir diseños vibrantes y duraderos a una amplia variedad de superficies, desde textiles hasta tazas y otros objetos, es una opción ideal para emprendedores y creativos que buscan ofrecer productos personalizados. Sin embargo, lograr una sublimación perfecta requiere prestar atención a varios detalles y seguir ciertos pasos con precisión.

En este artículo, te compartimos los mejores tips para hacer una correcta sublimación, ayudándote a obtener resultados impecables en cada proyecto.

1. Elige el material adecuado

Uno de los factores más importantes en la sublimación es el tipo de material en el que vas a trabajar. La sublimación funciona mejor en superficies que contienen un alto porcentaje de poliéster o tienen un recubrimiento especial para sublimación. Los tejidos 100% poliéster son ideales para lograr los mejores resultados, ya que el diseño se adhiere de manera efectiva a las fibras y los colores se mantienen brillantes y definidos.

En cuanto a otros objetos, como tazas, platos o carcasas de móviles, asegúrate de que estén tratados con un recubrimiento para sublimación. Sin este recubrimiento, la tinta no se fijará correctamente, y los resultados serán pobres o desaparecerán rápidamente.

Tip extra:

Si estás trabajando con tejidos de mezcla poliéster-algodón, procura que el porcentaje de poliéster sea al menos del 65%, ya que un porcentaje menor podría afectar la intensidad de los colores.

2. Usa impresoras y tintas especializadas para sublimación

Para obtener una sublimación de calidad, es fundamental utilizar una impresora de sublimación y tintas diseñadas específicamente para este proceso. Las impresoras de sublimación utilizan tintas especiales que se transforman de un estado sólido a gaseoso cuando se aplican a través del calor, permitiendo que se adhieran al material.

El uso de impresoras de inyección de tinta normales o tintas incorrectas puede llevar a resultados defectuosos, como colores apagados, imágenes borrosas o un diseño que no se fija correctamente al material.

Consejo clave:

Asegúrate de que las tintas que uses sean de alta calidad y compatibles con tu impresora de sublimación. De lo contrario, podrías encontrarte con problemas como bloqueos en los cabezales de impresión o colores inconsistentes.

3. Imprime en el papel correcto

No todos los papeles de sublimación son iguales. Utilizar el papel adecuado es clave para obtener un buen resultado. El papel de sublimación está diseñado para retener la tinta hasta el momento en que se aplique calor, lo que garantiza una transferencia eficiente y nítida al material.

Asegúrate de imprimir en el lado correcto del papel (normalmente es el lado blanco o mate) y de que esté diseñado específicamente para sublimación. Un papel incorrecto podría no transferir la tinta correctamente, lo que resultará en colores desvanecidos o un diseño incompleto.

Pro tip:

Siempre guarda tu papel de sublimación en un lugar seco y fresco, ya que la humedad puede afectar su rendimiento y arruinar el proceso de impresión.

4. Ajusta correctamente la temperatura y el tiempo

Una correcta sublimación depende de aplicar la combinación correcta de temperatura, tiempo y presión durante el proceso de transferencia. Generalmente, la temperatura adecuada para la sublimación varía entre 180°C y 200°C (356°F y 392°F), y el tiempo de presión suele ser de entre 60 y 90 segundos. Sin embargo, estos parámetros pueden variar dependiendo del tipo de material y del producto que estés sublimando.

Es importante que consultes las recomendaciones del fabricante del producto o material que estás utilizando para obtener las condiciones exactas. Si la temperatura es demasiado baja o el tiempo es insuficiente, el diseño no se transferirá correctamente. Por otro lado, si aplicas demasiado calor o dejas la prensa demasiado tiempo, los colores pueden distorsionarse o aparecer manchas indeseadas.

Consejo útil:

Realiza siempre pruebas en pequeños fragmentos de material antes de sublimar un lote grande. Esto te ayudará a ajustar la temperatura y el tiempo para evitar desperdiciar productos.

5. Usa la presión adecuada en la prensa térmica

La presión también juega un papel esencial en la sublimación. Una presión insuficiente puede hacer que el diseño no se transfiera por completo o que se vea difuso. En cambio, una presión excesiva puede distorsionar el diseño o provocar marcas no deseadas en la superficie del material.

Asegúrate de ajustar la prensa térmica según el grosor del material y de seguir las recomendaciones del fabricante. Generalmente, una presión media es la más adecuada para la mayoría de los proyectos de sublimación.

Nota importante:

Verifica siempre el estado de tu prensa térmica antes de empezar. Las placas deben estar limpias y en buen estado para asegurar una presión uniforme y evitar manchas o deformaciones en el diseño.

6. Evita la humedad

La humedad es uno de los peores enemigos de la sublimación. Puede causar que los colores se mezclen o que aparezcan manchas en el diseño final. Para evitar este problema, es importante almacenar el papel de sublimación y los materiales en lugares secos y controlar la humedad en el área de trabajo.

Además, si vives en un clima húmedo o el lugar donde trabajas tiende a ser húmedo, considera precalentar ligeramente la prenda o el objeto que vas a sublimar antes de aplicar el diseño. Esto ayudará a eliminar cualquier rastro de humedad antes de la transferencia.

7. Alinea correctamente el diseño

Una correcta alineación del diseño es crucial para obtener resultados profesionales. Es importante que te tomes el tiempo necesario para asegurarte de que el diseño esté bien colocado sobre el material antes de cerrar la prensa térmica. Para ayudarte en este proceso, puedes utilizar cinta térmica, que es resistente al calor y ayuda a mantener el papel de sublimación en su lugar durante la transferencia.

También puedes usar guías o reglas para asegurarte de que el diseño esté centrado y alineado en la prenda o el objeto. Un pequeño error en la alineación puede arruinar un proyecto completo, así que no dudes en invertir tiempo en este paso.

Tip extra:

Si vas a sublimar varias piezas iguales, crea plantillas para ayudarte a colocar los diseños en la misma posición de manera consistente.

8. Deja que el producto enfríe adecuadamente

Después de completar la transferencia, es importante dejar que el producto enfríe completamente antes de manipularlo. La tinta de sublimación sigue en proceso de fijación mientras el material se enfría, por lo que mover o tocar la prenda u objeto antes de tiempo puede hacer que el diseño se distorsione o que se formen manchas.

Coloca los productos en una superficie plana y déjalos enfriar durante unos minutos. En algunos casos, es útil utilizar una tabla de enfriamiento o un ventilador para acelerar el proceso, pero nunca intentes forzarlo aplicando presión o calor.